El sector sanitario y el orientado a la tercera edad han sido de los segmentos inmobiliarios de mayor crecimiento y desarrollo a nivel nacional durante los últimos años.

La población, cada vez más envejecida y con una esperanza de vida mayor demanda cada vez más servicios sanitarios, tanto públicos como privados, así como, un nuevo estilo de vida para aquellos con dependencia y aquellos que cuenten con gran independencia.

En la ciudad de Málaga, el segmento del Senior Living o residencias para la tercera edad cuenta desde hace años con algunos centros. En un mercado que tras la situación sanitaria experimentada en los últimos meses demanda de mayor profesionalización el interés inversores y por parte de operadores ha aumentado.

La mayor parte de la población sitúa por encima de los 35 años. Este dato muestra una población adulta y madura que se encamina hacía una pirámide de población en V. Este echo marca la tendencia de la necesidad a medio plazo de mayor número de camas sanitarias para atender a estás personas, así como, de los nuevos modelos residenciales para la tercera edad. Está tendencia se repite, de media en el resto de las grandes urbes del territorio nacional, algunas de ellas han mostrado gran volumen de inversión en los últimos años en estos segmentos debido al amplio recorrido que tienen a futuro.

En 2019 y primeros meses de 2020, estos nuevos modelos captaron las miradas de algunos inversores en la ciudad, que ven en la capital de la Costa del Sol un gran potencial por su calidad de vida y comunicación.